Descubriendo el barco Juan Ignacio Molina en Valparaíso
Fueron 34 personas entre estudiantes, apoderados, docentes, vecinos, los que viajaron desde Villa Alegre a Valparaíso a conocer el barco Juan Ignacio Molina, un navío científico que lleva el nombre del pionero de la investigación en Chile, cuyos restos están justamente en la Iglesia de esta vecina localidad.
Con el apoyo de la Municipalidad, que facilitó el transporte para responder a la invitación hecha por Patricio Herrera Ugarte, Jefe del Departamento de Operaciones Marinas del Instituto de Fomento Pesquero de Valparaíso,los estudiantes efectuaron una visita simbólica para conocer in situ, el buque dedicado a las ciencias y a la investigación.
Fue un grato encuentro que disfrutaron todos y todas, incluyendo obviamente el equipo del cortometraje «Molina, el Abate».
Ellos quedaron muy agradecidos del grupo «Cazando Historias».
Al respecto, conversamos con Cristian Garcia Astudillo, profesor de Historia y Geografía de la Escuela Timoteo Araya para conocer los detalles de este original viaje.
¿Cómo se gestionó el viaje después de recibir la invitación para conocer el buque Juan Ignacio Molina?
A través de la Junta de Vecinos de El Sauce que consiguió, de parte del Alcalde don Pablo Fuentes, la locomoción para transportar a Valparaíso a buena parte del equipo que participó en la realización del cortometraje Molina el Abate. Y fue por ese motivo que se nos invitó a conocer ese buque, ya que para ellos era muy significativo que estudiantes y comunidad de Villa Alegre pudieran visitarlo.
¿Cuántas personas viajaron y qué importancia tuvo para ustedes conocer este navío?
Fuimos 34 personas. De hecho, nos sentimos halagados por la invitación que se nos hizo. Sentimos que se nos consideró por el hecho de haber realizado el primer cortometraje dedicado a difundir la vida y obra de un naturalista nacido en las tierras maulinas. Conocer ese navío, dedicado a la investigación científica, fue la etapa que faltaba en nuestro periplo de difusión de la obra y figura del abate Molina.
¿Cómo los recibieron en el buque y que cosas le llamaron más la atención?
Nos recibieron muy bien, sin problemas. Nos condujeron al muelle donde habían lanchas esperándonos para llevarnos al barco. Al llegar nos recibió personal del barco, quienes se sintieron complacidos por nuestra visita. Sabían que veníamos de Villa Alegre y que habíamos hecho una película sobre el Abate Molina.
A mi, personalmente, me llamó la atención la sala de mandos, equipada con la última tecnología para realizar el trabajo de investigación que desarrollan. También la forma eficiente de usar el espacio que hay en el barco. Y que pasan 150 días en alta mar realizando sus análisis y estudios del recurso pesquero, principalmente el estado de la sardina y la anchoveta.
¿ Cúal es la importancia de la figura del Abate Molina para los marinos y científicos?
Yo creo que es una inspiración. Ya que el Abate, en su calidad de estudioso de la flora , fauna y también de algunas especies acuáticas, es un gran referente para estos investigadores. No por nada, el barco se bautizó con el nombre de Abate. También, cabe señalar, que una imagen de Juan Ignacio Molina está colgada en un lugar destacado dentro del barco.
¿Por qué fue significativo para ustedes este buque viajando de Villa Alegre?
Desde ya que un buque de la Armada, un buque destinado a investigación científica nos haga una invitación a conocerlo, es en sí mismo, un tremendo reconocimiento a quienes pasamos casi seis meses grabando un cortometraje sobre el Abate, pero también porque somos los primeros villa alegrinos en tener ese honor. Este es un barco que no todos conocen, pero la labor que desempeña es tremendamente importante e interesante.
¿Qué es lo que más interés despertó en los niños, niñas y estudiantes esta visita?
Creo que el trabajo que desempeña el buque en todo el mar chileno, el uso de tecnología de última generación para detectar las poblaciones marinas, su estado, volumen, etc. También detecta información de otros barcos e , incluso, de barcos hundidos.
¿Repetirían esta visita con otros estudiantes en futuras invitaciones, si está la posibilidad de hacerlo?
«Nuestro grupo tenía una motivación especial para ir a Valparaíso a conocer el buque Juan Ignacio Molina. La realización del cortometraje,nos permitió conocer muchos aspectos de su vida y de su obra. Por lo tanto, este viaje fue tremendamente significativo para todos. Al margen de todo eso, creo que repetir este viaje con otros estudiantes sería muy beneficioso, una salida pedagógica es siempre motivante para los alumnos, ya que, les permite aprender in situ temas de ciencia, historia u otras materias mediante una experiencia que difícilmente se les olvidará», concluyó.