Víctor Hugo Vera Oyarzo, director de la Fundación Trekking, encargado de los guías turísticos

Tiene un currículum vasto y extenso como el mismo territorio chileno, que ha presentado en innumerables ocasiones a los visitantes que llegan del extranjero.
Su experiencia incluye «una suerte de vida», como nos señala. «Soy hijo de una profesora y mi padre de la Armada de Chile, que han sido dos estructuras importantes en mi vida que me permitieron desde muy joven incursionar en la pedagogía».
«Me fui primero al ejército, cursé pedagogía y fui instructor de infantería y despegué al tiro. Estuve cinco años en la Escuela de Infantería del Ejército, 17 años como instructor en la Escuela de Montaña del Ejército, otros tantos años en la Escuela de Paracaidistas. En otros tiempos, fui a Alaska como instructor invitado y después me fui a la Antártica por un año. Cuando llegó el momento del retiro de las escuelas matrices, ingresó a las primeras carreras de turismo aventura que hay en Chile, en la la U de Pucón precisamente, estuve como director seis años y después salté a la Universidad Santo Tomás, Inacap, la Fundación Trekkingchile, y sigo con mi carrera docente porque me encanta la parte académica», puntualiza.
¿ Cuando te diste cuenta que tu llamado posterior era el turismo sustentable?
«Los primeros síntomas e indicios de esta sustentabilidad, la observé en Alaska, en Estados Unidos. Posteriormente voy a la Antártica y veo exactamente lo mismo. Empecé a aprender el tema hasta que llegué a la Universidad en Pucón y dentro de la malla curricular estaba la asignatura de Ecoturismo y Turismo Sustentable, y ahí hago el curso de monitor de la Escuela de Medio Ambiente de Estados Unidos, y posteriormente, la Escuela de Maestros y me voy como maestro al Ecuador a las Islas Galápagos, y allá término de fanatizarse con la sustentabilidad Hoy dia con la Fundación Trekkingchile que tiene otros programas similares como «Fair Chile» y el cuidado del medio ambiente, la verdad es que, estamos con la debida mesura aportando a todo lo que es el cuidado de nuestro planeta».
¿ Cuál es el principal desafío que tienes para el 2023 como instructor y maestro?
«Actualmente estoy haciendo cursos en el DUOC de la Católica. Soy profesor de Ecoturismo y Turismo de Aventura y también de Vinculación con el Medio. La proyección para el próximo año, incluye adiestrar a los jóvenes que egresan de la enseñanza media y de los liceos politécnicos de turismo».
¿ Qué es lo primero que inculcas en los estudiantes cuando deseas incentivar el valor del paisaje y del turismo sustentable en Chile?
«El Turismo brinda emociones. Emociones que se transforman en experiencias, tangibles o intangibles. Yo las puedo tocar, oler, ocupar los cinco sentidos y si no intangibles, es decir, que las puedo contar según mis experiencias. Esas primeras frases van relacionadas íntimamente con decir que es Chile. Un precioso país con más de cuatro mil kilómetros de cordillera en el cinturón de fuego del Pacífico, que tiene valles centrales, tiene una costa marítima enorme, volcanes, lagos, afluentes, ríos, lagunas, flora, fauna, el canto de los pájaros, la diversidad que tiene desde el desierto más árido del mundo hasta los hielos patagónicos, campo de hielo sur, campo de hielo norte. Limitamos con el mar de Drake donde se junta el Atlántico con el Pacífico, ingresamos a la península Antártica, bajamos por ella y podemos llegar al Polo. La verdad es que nuestro país, merece el apelativo de Chile Lindo.»
¿ Es importante considerar al Turismo como la mayor fuente de riquezas que tiene el país ?
Obviamente el sueldo de Chile no es sólo el Cobre. El PIB hoy día tiene al turismo en segundo lugar. El cobre está primero y después viene el turismo. Nosotros desde la Fundación Trekkingchile creemos en el Turismo y por eso participamos de estas cosas. Nosotros no nos relacionamos con estamentos, instituciones o personas que piensan en negativo. Al contrario, tenemos un universo de 523 guías internacionales en nuestras bases de datos, sin ninguna competencia y confrontaciones, en un ámbito del turismo de intereses especiales. Es una diversidad enorme. Por lo tanto, la obra de Franz Schubert con Cathy, ha sido tremenda. Y nuestro directorio que somos todas personas muy querentes de lo que hacemos, aportamos para que este equipo funcione óptimamente».
¿ Cuál es la mayor riqueza de formar jóvenes en esta área de turismo sustentable ?
«Es muy rico encontrarme en la calle con mis exalumnos que son miles y que el alumno me presente a su esposa, o la alumna me presente a su esposo y a sus cuatro hijos. Eso para mi, es un grado de satisfacción enorme. Me los encuentro en los supermercados, en la calle, en un rescate o en una búsqueda y nos juntamos, nos abrazamos, nos recordamos cosas y si podemos, tomarnos un café y compartimos el momento. Yo creo que eso es una gran satisfacción. Hago hincapié que todos los méritos que estoy vertiendo en estos momentos, se los debo a mi querida mujer, Ximena, 44 años de casado, ella ha sido la que ha estado más en el hogar, con los cuatro hijos y los nueve nietos que tenemos y me ha dado la oportunidad de viajar lejos , ir al terreno, dormir a veces durante el año, más en la carpa que en la casa, y en realidad los méritos son para ella, mi querida esposa».
¿ Cuántos hijos siguen tu vocación profesional?
«Los cuatro hijos. Todos son deportistas de aventura extrema. Mi hija es profesora de educación física, mi hijo es triatleta, y todos salieron exactamente en lo mismo, porque yo les di un estilo de vida desde chicos. Durmieron en la carpa desde pequeños, aprendieron a pescar, a saltar en paracaídas, los llevaba a bucear, formaron un estilo de vida en una condición atípica, porque no es común que en Chile ello ocurra».
¿ Qué cosas negativas tenemos en el turismo en Chile y que cosas positivas nos caracterizan en este ámbito ?
«En lo negativo, le falta mucho cariño a la gestión. El signo pesos deja a veces como segundo lugar a la sensibilidad del ser humano. Y en turismo ocurre exactamente lo mismo. Nosotros vendemos emociones que son experiencias como dije, pero cuando uno no lo siente de esa manera, naturalmente va en bajada. Nuestro turismo en Chile tiene un tremendo potencial y una diversidad enorme, pero hay que hacerlo bien. Desde el año 2011 está la ley del turismo, 20.423, y las normativas de turismo aventura que son 24 y eso moderó un poco el desorden que había y los grados de accidentabilidad que tenía la actividad. Por lo tanto, el Turismo románticamente vive y seguirá viviendo por muchos años. Lo positivo es que yo vivo en Pucón y el 98% de la economía es turismo. Es un ejemplo claro. Se puede vivir y sobrevivir del turismo».
¿ Qué ventajas ves en la región del Maule dedicada al turismo sustentable?
«Crean en el turismo porque particularmente es una zona con una tremenda diversidad y una potencialidad enorme, desde la cordillera al mar. En los valles centrales tienen un turismo muy atípico, el enoturismo, el aviturismo, el etnoturismo, el turismo de intereses especiales, el turismo inclusivo, y más encima todo el turismo aventura, en lugares hermosos e históricos como son por ejemplo, El Enladrillado, Los Altos de Lircay y la Laguna Pehuenche», concluyó.