Con exhibición de platos típicos de la cocina chilena:
Subsecretaría de Agricultura y ACHIPIA lanzan campaña “Inocuídate este 18”

El “18” es la fecha en que más se disfruta la gastronomía nacional, donde la mayoría de la gente se luce con recetas y recomendaciones para hacer el mejor asado y las mejores empanadas, pero si no se toman las medidas para asegurar la inocuidad alimentaria, las personas se exponen a sufrir problemas como dolores estomacales, gastroenteritis e incluso enfermedades más graves, como parasitosis, problemas renales e incluso, septicemia.
Por esta razón la Subsecretaria de Agricultura, a través de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria (ACHIPIA), lanzó la campaña “Inocuídate este 18”, acción que busca entregar a la población una serie de recomendaciones sobre los cuidados que se deben tener al momento de consumir alimentos durante estas Fiestas Patrias y así contribuir con la promoción de una cultura de inocuidad en el país.
En la instancia, el subsecretario de Agricultura, José Guajardo Reyes, recalcó que el alimento, como elemento vital para nuestra existencia, “nos aporta los nutrientes que necesitamos para mantenernos vivos y sanos, y es un motivo para juntarnos a celebrar, compartir y socializar. Cualquiera sea la instancia, como Gobierno trabajamos para que el alimento no sea una fuente de transmisión de enfermedades y desde el Ministerio de Agricultura, nos hemos desplegado en terreno para que nuestros productores apliquen buenas prácticas de higiene a lo largo de las distintas etapas del sistema alimentario”. Asimismo, enfatizó en que “realizamos esfuerzos de manera coordinada para que los alimentos producidos en Chile y los que son importados, sean seguros para su consumo”.
La diferencia entre un “18” memorable y uno para el olvido
Junto al destacado chef Carlos Carmona, especialista en sanidad de los alimentos, las autoridades destacaron la importancia de la responsabilidad que cada persona tiene para disminuir los riesgos al momento de manipular alimentos. Para eso, señalaron que es indispensable considerar siempre las cinco claves de la inocuidad de los alimentos, entregadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS): mantener la limpieza de superficies y de utensilios, separar alimentos crudos y cocinados, cocinar completamente los alimentos, mantenerlos a temperaturas seguras, y usar agua y materias primas confiables.
Así lo indicó el secretario Ejecutivo de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria (ACHIPIA), Diego Varela. “A todas aquellas personas que trabajan produciendo, transformando, manipulando y vendiendo alimentos, los llamamos a ser responsables. Todos los que consumimos sus productos ponemos nuestra confianza y salud en sus manos. A quienes compran alimentos les pedimos que lo hagan en el comercio establecido, ya que es ahí donde el Gobierno ha puesto sus esfuerzos de fiscalización”, dijo. Y recalcó “a todas las personas que están cocinando en sus casas, siempre es bueno recordar las cinco claves de la inocuidad. Queremos que éstas sean unas excelentes celebraciones y que la inocuidad sea nuestra mejor receta en estas fiestas”.
Al momento de comprar carnes se recomienda que esté fresca o congelada, que provenga de lugares autorizados y que esté debidamente etiquetada. Al llegar a la casa debe refrigerarse a una temperatura de entre 0 y 5°C y mantenerla siempre separadas de otros alimentos crudos.
No es recomendable congelar una carne que ya fue descongelada. Es prioritario usar cuchillos, platos y tablas distintas para carnes crudas de los que se usa para preparar el resto de los alimentos y es preferible cocinar completamente las carnes y cecinas, asegurándose que los jugos no sean rosados y que no haya restos de sangre.
En cuanto a la carne de vacuno es recomendable que la superficie esté brillante, firme al tacto, ligeramente húmeda y de color rojo. Si presenta una superficie pegajosa, está blanda al tacto, de color verdoso o negruzco y con olor fuerte, debe descartarse.
La carne de cerdo, en tanto, debe tener una superficie brillante, estar ligeramente húmeda, de color rosada y sin presencia de granulaciones. Si presenta elementos blanquecinos del tamaño de una lenteja, no se debe consumir.
En cuanto al pollo, este debe tener una piel de color uniforme (amarillo pálido oscuro) y la carne debe estar rosada y húmeda. Si la superficie está seca o pegajosa, blanda al tacto, si se deshace y la piel se desprende fácilmente de la carne, no debe consumirse.
Preferir productos de la Agricultura Familiar Campesina
Respecto a verduras, frutas y hortalizas, se recomienda lavarlas con agua potable, especialmente si se consumirán crudas. Si estos alimentos están cocinados es importante refrigerar lo antes posible. No es recomendable dejarlos a temperatura ambiente por más de dos horas. En el refrigerador, se deben guardar los alimentos cocinados en los compartimentos superiores y las carnes crudas en los inferiores. Es necesario, además, no guardar los alimentos cocinados por más de tres días en el refrigerador.
El llamado del Ministerio de Agricultura, además, es a consumir productos de la Agricultura Familiar Campesina (AFC) y visitar ferias libres, espacios donde se comercializan alimentos de gran calidad.
Se invita a la ciudadanía a visitar las Tiendas Mundo Rural, iniciativa que ofrece productos con propuestas innovadoras, de producción consciente e identitarios, que fomentan el desarrollo local y que ayudan a recuperar tradiciones gastronómicas. Dichos productos de nuestra oferta nacional han sido creados por pequeños agricultores y emprendedores del campo chileno, contando con una variedad de producción, amplia en materias primas, de pequeños lotes, de calidad artesanal, libre de químicos y amigables con el medio ambiente.
Actualmente se cuenta con siete Tiendas Mundo Rural: Metro escuela Militar, Metro Pajaritos y Centro Cultural La Moneda, en Santiago. La Vega Monumental de Concepción, el Terminal de Buses de Valdivia, y el Mall Arauco de Chillán, la primera tienda especializada en vinos de la Agricultura Familiar Campesina de los Valles de Itata y Biobío.