Hay mucha negligencia más que dolo en el surgimiento
de los incendios forestales, que además, concomitan
las condiciones que están en el terreno

Al Ingeniero Forestal Mauricio Ponce Donoso, el tema de los incendios forestales le preocupa muchísimo, porque se ha insistido hasta el cansancio en la necesidad de cambiar las miradas respecto a cómo ordenamos el paisaje para evitar que casi todos los años, tengamos eventos tan graves como los que estamos viviendo por estos días en Chile. «Diario Maule Hoy» insistió en entrevistarlo para conocer desde sus amplios conocimientos y practicidad donde podrían estar las soluciones a este problema.
¿ Por qué resulta tan complejo recuperar el bosque nativo y el equilibrio ambiental que se ha roto nuevamente con estos numerosos incendios forestales?
«Ciertamente es muy complejo recuperar el bosque nativo, porque es una composición de especies vegetales como también una serie de animales, que tiene su propia ecología. Por lo tanto, partir de cero es una cuestión extremadamente compleja, porque hay que ir recomponiendo las diferentes sucesiones que ese bosque nativo ha tenido. Yo creo que, en general, es una iniciativa de muy largo plazo y que requiere recursos económicos y profesionales especiales para poder llegar a recuperar el bosque nativo. Asimismo, más allá de las iniciativas de recuperación, se hace urgente y necesario una planificación de corto, mediano y largo plazo que permita justamente esta recuperación, que es una restauración ecológica de estos espacios . En ese mismo ámbito, Chile hace poco está ejecutando un proyecto financiado por el GEF y ejecutado por el Ministerio de Medio Ambiente y CONAF con apoyo de la FAO, que busca la restauración de un millón de hectáreas y siento que ese proyecto que recién está empezando, podría eventualmente, mejorar en términos de recursos, profesionales y económicos, para ampliar la base territorial y tener por cierto, una cantidad de hectáreas mucho mayor para la recuperación del bosque nativo».
¿ En qué aspectos aún es débil la ley para castigar a las personas que incurren en actos de destrucción de la naturaleza?
«Hay mucha negligencia más que dolo, en el surgimiento de los incendios forestales, que además, concomitan las condiciones que están en el terreno y como ya se ha dicho en muchas ocasiones, respecto a la temperatura, la humedad y los vientos. Ahora bien, resulta muy difícil capturar a las personas que eventualmente realizan incendios de manera dolosa y negligente. Lo único que se hace es una investigación ex post incendio para conocer si el origen es de manera fortuita, negligente o dolosa».
¿ Cuanta recurrencia hay, de que este escenario trágico se nos repita año a año en Chile, con consecuencias nefastas para la vida humana y silvestre?
«No me siento muy capacitado para responder, pero en todo caso, respecto a la recurrencia, nosotros tenemos que plantearnos una planificación territorial mucho más orientada a la posibilidad de gran recurrencia de incendios. ¿ Qué quiere decir esto? Cercanía de masas forestales, de poblaciones, limpieza de terrenos, uso de cortafuegos en plantaciones forestales, etc. Existe una buena tecnología de CONAF respecto a este tema, lo que pasa es que, con los vientos que hay, la temperatura y la humedad se hace realmente complejo poder combatirlos».
¿ Por qué es tan importante insistir en que las plantaciones de monocultivos agotan nuestras reservas hídricas y convierten el territorio en algo muy vulnerable donde se pierde el equilibrio para la sustentabilidad ambiental?
«Respecto de las plantaciones de pinos y eucaliptus, sin duda que hay un mayor consumo de agua porque las plantaciones crecen más rápido. A pesar de que hay algunos estudios que señalan situaciones contrarias a eso. Dependerá por ejemplo de la cuenca y se está estudiando. Es aún un tema controvertido, Las plantaciones de pino y eucalipto sin lugar a dudas, han roto el equilibrio hace rato de lo que significaba el bosque nativo, pero también hay que considerar que, la actividad del hombre, la agricultura y la instalación en distintos lugares de casas, en los lugares más recónditos sin una planificación adecuada, sin estándares que permitan que eventualmente enfrentan los incendios, la supresión puede hacerse mucho más efectiva en el corto plazo . Yo creo que las plantaciones generan vulnerabilidad . Está claro para un incendio, pero tampoco hay que ser extremista y pensar que, porque uno tiene un bosque nativo, el fuego no va a desplazarse de alguna forma como lo podría hacer en una plantación de pinos».
¿ Qué otros aspectos vulneran el equilibrio ambiental y abren la puerta a incendios devastadores como los que estamos sufriendo hoy día?
«Prácticamente todo porque la presencia del ser humano y de las acciones que realiza en el territorio, modifican ese equilibrio ambiental, y es en ese contexto, donde creo yo se debería trabajar en una restauración del paisaje, con una mirada de planificación de territorio, donde el fuego y los potenciales incendios que puedan haber, son elementos centrales que deben ser considerados frente a su ocurrencia, para que se minimice los efectos que estamos observando hoy».
¿ Cuánta culpa hay del cambio climático en estos incendios, o simplemente son excusas de otros aspectos más directos que llevan a la devastación de cientos de hectáreas?
«No se si la culpa es del cambio climático, porque la responsabilidad sin lugar a dudas, son de las personas, que estamos en este mundo global y cuya conducta está llevando a ese cambio climático de manera mucho más acelerada. La temperatura, la humedad, el viento, la presencia de actividad antrópica en el territorio, son elementos que están cambiando lo que antes eran terrenos donde no habitaba nadie. Hoy día se instalan casas de manera poco o nada planificada, y tenemos en esos lugares actividades hechas por el hombre que aumentan el riesgo de incendios. Entonces también tenemos que hacernos cargo de mejores planificaciones del territorio y eso tiene que ser, si o si».
¿ Qué importancia tiene la educación ambiental para la formación del cuidado y preservación de la naturaleza?
«La educación ambiental es una cuestión fundamental a la hora de la planificación de la convivencia con el bosque nativo, con las plantaciones. No tenemos porque necesariamente provocar incendios de manera negligente o dolosa frente a la posibilidad de que exista un bosque o una plantación. Tenemos que saber que no podemos hacer fuego. Las actividades agrícolas donde se aplica fuego, simplemente no deberían ser realizadas y debería haber absoluta prohibición. La publicidad al respecto no contribuye claramente. Yo veo letreros bien poco felices en lo que es el mensaje. Es distinto decir «Queda prohibido hacer fuego». Es muy distinto», concluyó.